martes, 4 de noviembre de 2008

Reveses de la vida


El texto que les dejo a continuación es atribuido insistentemente a Quino, pero Quino, según parece lo desmintió con la siguiente misiva. “Deseo aclarar vehementemente que un texto titulado La Vida Según Quino que navega en internet no solo no está escrito por mi sino que me molesta profundamente que alguien pueda creer que soy el autor. Siempre he expresado mis ideas a través del dibujo y jamás escribo textos sin ilustrarlos. Me indigna que alguien haya usurpado mi nombre para proponer sus ideas y si encima esas ideas son tan ñoñas y necias mucho más aún. Agradeceré a todos la difusión de esta aclaración. Quino”. En fin, que mas allá del anonimato o no de su autor, mi intención es tentarlos a pensar si el argumento del susodicho texto da para sostener una sonrisa de aprobación o una putiada de desacuerdo. Helo aquí. Mariana Hernández Larguía.

Pienso que la forma en la que la vida fluye está mal hecha. Debería ser al revés, uno debería morirse primero para salir de eso de una vez por todas. Después, vivir en un asilo de ancianos hasta que te saquen cuando ya no sos tan viejo como para estar ahí. Entonces empesás a trabajar y trabajar por cuarenta años hasta que sos lo suficientemente joven como para disfrutar de tu jubilación. Después, fiestas, parrandas, drogas, alcohol, diversión, amantes, novios, novias, todo, hasta que estás preparado para entrar en la secundaria. Después pasas a la primaria y sos un pibe(a) que se la pasa jugando sin responsabilidades de ningún tipo. Después pasas a ser un bebé y vas de nuevo al vientre materno y ahí pasas los mejores y últimos nueve meses de tu vida flotando en un líquido tibio, hasta que por fin, tu vida se apaga en un tremendo orgasmo. ¡Esto sí que es vida!.

No hay comentarios: